sábado, 23 de mayo de 2015

A mediados de los años ochenta se inauguró en Vigo el pabellón del colegio Compañía de María. Para el estreno de la instalación acudieron a jugar un partido amistoso el Obradoiro de Santiago y un club local, el Ademar. La expectación entre los alumnos del centro educativo ya era máxima ante semejante acontecimiento, pero lo que pocos sabían era que el equipo local iba a contar como 'refuerzo' con uno de los mejores extranjeros de la ACB, un tal Nate Davis.


Fijaos en la foto que me ha pasado Darío Méndez. El Ademar (de amarillo) y el Obra (de rojo) en el pabellón del colegio. La gente (niños y no tan niños) que llenaban el recinto, en el que no cabía ni un alfiler. Incluso se montaron gradas supletorias para que la gente pudiese ver a sus ídolos. En la foto está Nate Davis en pleno lanzamiento, con una de sus famosas suspensiones. A su lado está Mario Iglesias.

Nate Davis, con la camiseta del Ademar
(Foto: Luis Alberto Rey Lama - Bodas de Platino)
Según me ha contado Darío, la presencia de Nate vistiendo la camiseta del Ademar en un pabellón de colegio fue posible gracias a la amistad que mantenían el presidente del OAR, Juan Fernández, y el del Ademar, Carlos Núñez. Eso permitió contar con la estrella ferrolana en aquel partidillo.

Parece ser que el bueno de Nate no solo demostró sus habilidades ante la atenta mirada de cientos de niños vigueses. También se fotografió con todo aquel que se lo pidió y no paró de firmar autógrafos. "Un bendito el Nate, y muy divertido Ricardo García", me cuenta. García era otro jugador del OAR en aquella temporada 1984-85.
Plantilla del Ademar Vigo, reforzada por Nate Davis y García
(Foto: Luis Alberto Rey Lama - Bodas de Platino)
Entre los jugadores del Obradoiro que disputaron aquel partidillo estaban (entre otros) Alberto Abalde, De la Concepción, Mario Iglesias... Creo que al grupo también se unió Popocho Modrego. Ojo, que aquella plantilla del Obradoiro es la que se proclamó Campeón de España de Segunda División y consiguió el ascenso a Primera B. Un gran equipo entrenado por Alfonso Rivera.

Suso Cobián guarda un cartel que anunciaba el famoso partido
La experiencia tuvo que ser inolvidable para los alumnos del centro que tuvieron la suerte de ver en el pabellón de su colegio al máximo anotador de la ACB, a un gran equipo (el Obra) y al equipo de la ciudad reforzado por Nate Davis. Casi como un recreo cualquiera en el patio del colegio!
Etiquetas:

3 comentarios:

  1. Ricardo García fue el otro refuerzo del Ademar. Me acuerdo perfectamente del partido. LLeno hasta la bandera. Una anécdota fue que aquel árbitro: Cardalda, no dejó hacer la rueda de calentamiento al equipo local, o mejor dicho a Nate Davis, con lo que la gente se quedó sin sus expectaculares mates del principio

    ResponderEliminar
  2. El mítico Cardalda, recuerdo un partido del CB Santiago que paró para llamar a la policía nacional porque había oído desde la grada lo que él consideró un insulto, "que malo eres" algo así, a partir de ese día cuando me enteraba que venía a Santiago iba a verlo, era un auténtico espectáculo.

    ResponderEliminar